Casi desde el primer trailer quise ver
esta película a pesar de algunas malas críticas que pude leer, señalando que se
trataba de un filme demasiado largo y que llegaba a aburrir en algunos
momentos. Sin embargo, el casting de esta obra estaba repleto de estrellas
conocidas del cine británico, además de que la novela en la que se basa la
había leído alguien conocido, por lo que decidí darle una oportunidad. Aprovechando
esta tarde de tormenta, tan comunes en el verano de las tierras gallegas, voy a
escribir una pequeña reseña que espero que os anime a ver esta original
película.
Este filme, ganador de dos premios BAFTA, tiene lugar en los
años 70, en plena Guerra Fría. El fracaso de una misión especial en Hungría
hace que se produzca un cambio en la cúpula de los servicios secretos
británicos. Uno de los afectados es George Smiley, el cual es obligado a
retirarse de los servicios secretos. Sin embargo, cuando éste ya se había
acostumbrado a la nueva situación le encargan una nueva misión: Se sospecha que
hay un “topo” infiltrado en la cúpula de la inteligencia británica y solamente alguien
que esté fuera de ésta puede averiguarlo. Con la ayuda de otros agentes
jubilados Smiley va juntando información y encajando las piezas para descubrir
al traidor.
Hay que tener en cuenta que no me he leído la novela, por lo
que no puedo juzgar si la adaptación es fiel a la novela o no, así que me
centraré en otros aspectos del filme. La fotografía y ambientación está bien
cuidada, transportándonos a los tiempos de tensión de la Guerra Fría. Por otro
lado, la música está a cargo del compositor español Alberto Iglesias, el cual
ha hecho también un buen trabajo, perfeccionando aún más si cabe la
ambientación de la película.
Lo que más me ha gustado de este filme han sido sin duda
alguna las interpretaciones. Gary Oldman hace la que puede ser la actuación de
su vida interpretando a un personaje complejo como es George Smiley, un hombre
calmado y atormentado por sus demonios del pasado. Espero que algún día su
trabajo se vea premiado con un Óscar. Benedict Cumberbatch interpreta a Peter
Gilliam, el cual va a ayudar a Smiley en su investigación. Su personaje también
es de vital importancia en la historia y también es partícipe de destacables escenas en el filme. Otro actor que también me ha sorprendido es Tom Hardy, del
cual soy fan en otras películas tales como la última entrega del
Batman de Christopher Nolan o “Origen”. En este caso da vida al espía británico
Ricki Tarr, el cual es el que avisa en primer lugar de que hay un posible
infiltrado en la cúpula a raíz de la información que le da la esposa de un
oficial de inteligencia del centro de Moscú. El ganador del Oscar Colin Firth
también hace una actuación memorable interpretando al complejo Bill Haydon,
otro personaje al que no hay que perder la pista. John Hurt está soberbio dando
vida a Control, el máximo responsable del “Circus”, que posteriormente es
despedido y dejará pistas a Smiley para que lleve a cabo la investigación. Podría escribir varias hojas hablando de cada
uno de los actores, pero en general todos ellos han hecho unas interpretaciones
memorables.
Un aspecto que me ha gustado mucho de este filme es la
introducción de los flashbacks, los cuales nos ayudan a entender mucho mejor
la historia y nos ponen en situación. El único defecto que le veo es el mismo
que le encontré en su día a Zodiac. A pesar de que parece que una película no
tiene que ver con la otra (en una se intenta buscar a un asesino y en otra a un
espía), ambas se centran en investigaciones que se desarrollan en un intervalo
de tiempo amplio, lo cual puede hacer que el largometraje se haga “largo” y “pesado”
en algunos puntos. Sin embargo, los giros argumentales y las escenas centradas
en el pasado hacen que la película sea interesante y que merezca la pena verla.
¿Más o menos de lo mismo? El director de Let the right one
in (que, por cierto, es una de mis películas favoritas) hace que una película
de un género tan trillado como es el thriller capte mi interés. Las
interpretaciones son sobresalientes y hay alguna que otra escena para el recuerdo.
Precaución a los que no os gustan las películas de investigación y espionaje,
porque la película se puede hacer demasiado larga.
Valoración: 6/10
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